Señales de que estas saliendo con un niño y no con un hombre

La verdad es que no tienes que conformarte con cualquier chico que venga a tu vida. Tienes que ser honesta y justa contigo misma. Si vas a estar con un hombre, entonces que sea un hombre de verdad. No hay ninguna razón para salir con los tontos que no saben apreciar tus muestras de cariño y tu dedicación. Lo único que podrás experimentar en una relación insana será la rabia y el sufrimiento. Para formar una relación feliz y duradera, primeramente hay que establecer una amistad. Aunque, para ser sinceros, al principio puede ser difícil conocer el verdadero semblante de otra persona, pero con el tiempo todo se irá haciendo evidente. Lee estos 10 señales que te ayudarán a distinguir entre los chicos inmaduros y los hombres de verdad.

1. No te habla con claridad

Hace tiempo que salen juntos, pero tú sigues sin tener claro qué tipo de relación es la de ustedes porque él nunca te ha dicho si sólo quiere una aventura contigo o le gustaría formar una relación duradera. Un chico inmaduro no suele comprometerse oficialmente, no habla de lo que siente ni le importa cuáles son tus sentimientos hacia él, porque tiene miedo de que lo rechaces cuando te pregunte. Prefiere vivir en la dulce ignorancia y disfrutar el momento sin pensar en el futuro.

2. Es vago

Siempre tiene alguna excusa para no dedicarse a las labores del hogar. Su apartamento se ve como un basurero, su ropa se encuentra dispersa por todos lados y si no fueras tú quien le regaña y le obliga a hacer la limpieza o a lavar su ropa, probablemente nunca lo haría por sí mismo. Los hombres adultos no son así, ellos sienten orgullo al rodearse con un ambiente que apoya un estilo de vida activo y saludable. Y claro, no son perfectos amos de la casa, pero al menos lo intentan.

3. Sus malos hábitos te sacan de tus casillas

Un hombre cuida su desarrollo y piensa en su futuro, mientras un niño cuida lo que le hace feliz en este preciso momento sin preocuparse por lo que vendrá después. Es cierto que tenemos que disfrutar el cada momento, pero no se trata de vivir sin propósitos ni ambiciones. Hay que siempre pensar de las consecuencias de nuestros actos. Un hombre sabe ser responsable y sabe planear algunas cosas con antelación.

4. No piensa en el futuro

Como lo hemos dicho anteriormente, a un chico inmaduro no le importa el futuro. No tiene planes para su vida ni se anima a perseguir sus sueños (si es que los tiene), sólo quiere vivir el momento, sin preocuparse por nada. Se enfada cada vez que le preguntas por el futuro, no sólo cuando tú lo haces, en general detesta hablar sobre este tema porque no tiene nada que decir.

5. Puede pasar todo el día jugando sin importarle qué está sucediendo a su alrededor

Nadie dice que los juegos son malos, pero por Dios, ¿quién pasa todo el día sentado enfrente de la computadora o de la consola? Si tu novio es uno de estos chicos cuya única afición son los juegos, pregúntate si quieres seguir con él. Un hombre de verdad sabe cuando es tiempo de trabajar, cuando tiene que ocuparse de sus deberes y cuando puede entretenerse y descansar. Todo en esta vida tiene sus prioridades. Si él no sabe elegir entre las cosas que son más importantes y la diversión y se sumerge en el mundo virtual por horas enteras, no esperes que cumpla tus expectativas en otros aspectos de la vida. Es un niño que aún no debería entrar en una relación amorosa porque simplemente no lo necesita.

6. Muchas veces te sientes como si fueras su mamá

¿Tienes la impresión de que él no sabe cuidar de sí mismo? No pone atención en su alimentación, no duerme suficiente, sale sin sudadera cuando hace frío, nunca lleva paraguas, siempre es muy distraído… Eres tú quien tiene que cuidarlo y recordarle qué es lo que debería hacer y qué puede tener malas consecuencias. ¡Ni siquiera se acuerda del cumpleaños de su madre, eres tú quien tiene que recordárselo! A menudo te repite que eres como su mamá, pero de quién es la culpa si él se porta como si tuviera cinco años. Si fuera maduro, sabría cuidarse a sí mismo y tomar decisiones apropiadas.

7. En cada discusión él usa las palabras “tú siempre” y “tú nunca”

Por lo general, las discusiones son muy útiles si al final ambas partes saben llegar a un acuerdo. Sirven para purificar la atmósfera y no para hacernos sentir todavía peor. Si él en cada discusión usa palabras como “siempre” o “nunca” es una señal de que no está tratando de resolver el problema, sino empeora las cosas. Este lenguaje, lleno de reproches y generalizaciones, utilizan las personas inmaduras e inseguras de sí mismas que no saben encontrar una solución, se sienten atacadas, por eso se ponen a la defensiva.

8. Es propenso a elegir mala compañía

¿Sus amigos son igual de perezosos que él? ¿Antes de conocerte a ti, siempre salía con las chicas que tienen la fama de “niñas malas”? No esperes un milagro, si le gusta la compañía la gente poco ambiciosa, no lo convencerás de tus puntos de vista. Tú y él son dos mundos tan diferentes que muy difícil será llegar a un acuerdo. Si no se aceptan mutuamente tal como son, esta relación no tiene futuro.

9. Está constantemente celoso

Tener celos es inevitable cuando se quiere a alguien y es verdad que en algunas ocasiones pueden ser una muestra de amor. No obstante, los celos excesivos son una enfermedad o es una señal de que la persona con la que estás se siente muy insegura de sí misma. Si tu novio te cela y se enoja por tus amigos, amigas, compañeros de clase o de trabajo, e incluso por los desconocidos que te miran en la calle (sin hacer nada), esto quiere decir que es muy inmaduro. Un hombre adulto no se porta así. Él confía en su mujer y le da plena libertad porque sabe que ella lo ama y no le va a fallar. Si no hay confianza, no hay nada. Hábla con él y pídele que no te eche más broncas. Trata de demostrarle que eres honesta y no to tiene por qué temer. A ver si cambia su actitud…

10. Es altamente irresponsable

Todo lo que se ha dicho aquí, se puede expresar en en una sóla palabra “irresponsabilidad”. Los hombres auténticos tienen su propia moralidad, sus metas y los sueños que quieren realizar. Son conscientes de cada paso que dan en su vida y asumen la responsabilidad por las cosas que hacen. Si algo no les va bien, no echan la culpa a los demás, no buscan pretextos, sino enfrentan el problema y tratan de encontrar la mejor solución.